MENSAJE DEL PRESIDENTE DE COLOMBIA A COMUNIDAD ARABE EN EL III ENCUENTRO CULTURAL COLOMBO ARABE Y II ARABE LATINOAMERICANO EN BOGOTA

El nuevo paradigma en el cual se enmarcan los flujos migratorios procedentes del Próximo Oriente (Líbano, Palestina y Siria), trae consigo la homogenización del pensamiento, de normas, valores, representaciones y demás, producidos por sociedades occidentales que se imponen. Esta tendencia cultural y de carácter antropológico y sociológico –dominante del momento– proyecta identidades colectivas, homogéneas y monolíticas generando, en sociedades como la de los Estados árabes, cierta resistencia al pasar de una situación de conciencia identitaria fragmentada a la afirmación e interés por afianzar el reconocimiento de su identidad cultural. Todo lo anterior se refleja a lo largo de cada una de las oleadas migratorias, y constituyen el proceso de inserción e integración del inmigrante árabe y sus descendientes a la sociedad colombiana.
La periodicidad de las tres oleadas está sujeta a momentos históricos con repercusiones económicas, políticas y religiosas importantes en sus lugares de origen; y, por otra parte, están sujetas a las condiciones que ofrecía Colombia como sociedad receptora. Por tanto, en la primera oleada (c 1880-1940) se pone de manifiesto una composición poblacional heterogénea, que emigra con un importante cúmulo de conocimientos en el oficio del comercio; esto permite un indiscutible posicionamiento dentro de la nueva élite socioeconómica que va surgiendo en la Colombia de principios del siglo XX. De ahí que se genere un entorno hostil al reñir con los intereses de la clase tradicional, dedicada a la tenencia de tierras. Lo anterior desencadena un obligado debilitamiento en la estructura sociocultural del inmigrante, en aras de lograr la aceptación y el reconocimiento de la sociedad receptora. La primera oleada, entonces, se ubica en la fase de estrategia cultural adaptativa al entorno.
La segunda oleada (1940-1970) encuentra una sociedad colombiana de mente abierta y con tendencia cosmopolita, permitiéndole al inmigrante una rápida inserción y un ambiente más favorable para el desarrollo de sus actividades; asimismo, halla grupos familiares de origen próximo-oriental ya asentados en la estructura social colombiana. Esta situación motiva las primeras iniciativas de organización de la comunidad en el marco de redescubrir su cultura ancestral, hasta ahora latente. Por tanto, esta oleada se caracteriza por los procesos de organización social y económica.
La tercera oleada migratoria árabe (1970-hasta nuestros días) renueva el sentido identitario de esta colectividad en Colombia, tal vez como un mecanismo-respuesta al fenómeno de globalización y a los cambios sociopolíticos evidenciados en Colombia a partir de la Constitución Política de 1991, en la cual se afirma el reconocimiento y el respeto por la diversidad cultural. Las condiciones anteriores propician lo que hemos denominado la efervescencia identitaria cultural de lo árabe, superando su estado de latencia que había mantenido en las oleadas anteriores.
Pero, ¿qué es ser árabe en Colombia? ¿Qué condiciones caracterizaron el proceso de apropiación y redescubrimiento de la identidad colectiva de los inmigrantes árabes y sus descendientes en este país? ¿Qué evidencias socioculturales dan cuenta del proceso de efervescencia identitaria y cuáles han sido sus repercusiones en el desarrollo social de Colombia? Y por último, desvirtuando la categorización de una Colombia triétnica, ¿cómo se traduce en la construcción de la identidad nacional el diálogo intercultural entre los nacionales de origen árabe y los nacionales netamente colombianos?
TOMADO DE FUNDACION ENCUENTRO CULTURAL COLOMBO ARABE.- BOGOTA, 8,9 Y 10 DE SEPTIEMBRE DE 2011